sábado, 6 de junio de 2009

Prestar atención a la vida cotidiana


Prestar atención a la vida cotidiana puede ser un buen ejercicio para desarrollar la concentración y la atención.

Prestar atención a la vida cotidiana, puede ahorrar sesiones de psicólogo e incluso de psiquiatra, porque al concentrar la mente en las tareas concretas, se reduce la velocidad del pensamiento que va continuamente del pasado al futuro y se evita la sensación de estrés y ansiedad.

El hacer las tareas de forma atenta, se gana en rapidez y por lo tanto en tiempo, con la posibilidad de hacer más cosas o descansar un poco, por ejemplo, haciendo unas respiraciones y ganando en salud.

Cuando se realizan las acciones de manera concentrada, hay menos errores, se reacciona con reflejos y se encuentra la solución correcta con más facilidad; ésto es, porque el cuerpo y la mente están relajados y la información corre fluida por el sistema nervioso y todas las respuestas físicas, se realizan de forma natural.

Hay varias técnicas, para conseguir estos objetivos, que desarrollaremos en los siguientes días, basadas en métodos teatrales, en la filosofia budista o en los chamanes sudamericanos.

Ahora, puedo tomar la decisión de mirar la vida cotidiana con otros ojos y aceptarla como mi camino de realización personal: en la casa, por el bien de mi familia y en el trabajo, por el desarrollo de la comunidad, que redunda en mi propio beneficio y en el de toda la humanidad.


foto: flickr

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